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Oicalpa Avir

Oicalpa Avir

Por Domingo Salgado Silverio

La semilla que se sembró, germinó y dio origen a nuestra Caja data del año dos mil dos y el pionero y fundador fue mi señor padre ya finado, Jesús Salgado Santana, quien en el año del dos mil dos gestionó ante la Secretaria de Desarrollo Social un proyecto familiar para cría de borregos. 

La organización se gesta en 2002

Se necesitaba formar un grupo de 6 personas, pero como no se completaba en la familia, invitó a otros vecinos oriundos de la misma ranchería Rincón de San Francisco, perteneciente al municipio de San Lucas, Michoacán, una pequeña ranchería de apenas 30 familias, el requisito era que tuviéramos y acreditáramos inmuebles rústicos propios, para el pastoreo y reproducción de los ovinos.

Acreditamos los requisitos y se nos dotó de un molino para moler forraje para alimentar los semovientes. Se nos propuso que permaneciéramos unidos y al empezar haber producción ahorráramos una parte de la  venta de los referidos animales. Se nos proporcionó médico veterinario y nos enseñó la forma como ahorrar, de ese grupo de seis beneficiados que permanecimos unidos en todo.

Nombramos nuestro Tesorero, nuestro ahorro era quincenal y teníamos que aportar una cantidad mínima de veinte pesos y no mayor de cincuenta. Ese dinero servía para préstamos entre nosotros, al módico interés del dos por ciento mensual, pues aquí los usureros cobraban hasta el siete por ciento en esa época. esos préstamos nos servían para la mejora de nuestras crías y equipamientos de corraletas, vimos que eso nos traía buenos resultados para el bienestar de nuestras familias y eso llamo mucho la atención a los demás pobladores de nuestra comunidad y se empezaron acercar a nosotros. Les propusimos que se unieran a nosotros para ahorrar y hacernos prestamos en nuestra Comunidad.

Aclaro que no llevábamos controles técnicos, solamente una libreta o cuaderno de entradas y salidas económicas, como tampoco firmábamos pagare alguno, solo nuestra palabra de honor y el compromiso de pagar en la fecha que se comprometía el deudor era válido.

Así se fueron adhiriendo más hasta llegar a veinticinco socios, desde luego como en nuestro pueblo todos nos conocemos no admitíamos a personas que no tuviera ese perfil, es decir , tenía que ser afín a nuestro proyecto, así permanecimos durante un periodo de dos años aproximadamente.

En una ocasión mi extinto padre Jesús Salgado Santana, en una reunión de la SEDESOL que se llevó en la Ciudad de Morelia, expuso la forma en la que estábamos creciendo debido al ahorro que estábamos haciendo de los remantes de las ventas de los ovinos. Fue entonces cuando el gobierno del Estado, gobernado en ese entonces por Lázaro Cárdenas Batel, mandó a nuestra Comunidad personal para nuestra capacitación, ahí nos dimos cuenta que en distintos municipios del Estado existían ya grupos de ahorradores y que eran liderados por la Licenciada Lidia Vázquez Gallegos, quien era la responsable de la formación, capacitación y asesoría de dichos grupos los cuales se llenaban “ Fondos Comunitarios de Ahorro y Préstamo” y que su base y sustento legal era el artículo 4º Bis de la Ley de Ahorro y Crédito Popular, ahora abrogada.  

 La función de dichos Fondos era  que en cada Comunidad tenía que haber un grupo de ahorradores originarios de la propia ranchería y con el perfil afín al proyecto buscado, es decir, los mismos socios tenían que recomendar a otra persona, el socio debía hacer el depósito de su ahorro en presencia física o ser representado por un familiar, hijo o esposa, para eso los ahorradores ya contaban con la capacitación y la papelería necesaria para su captura y transparencia.

De entre sus socios se buscaban las personas más honestas, responsables y con un buen prestigio moral en su Comunidad de los cuales se elegían a tres personas: TESORERO, SECRETARIO Y VOCAL DE VIGILANCIA con sus respectivos suplentes. 

Como no teníamos oficinas lo hacíamos en domicilio particular pero circulado con barda para no llamar tanto la atención. El socio, en presencia de todos pasaba a la mesa del Comité a entregar ahorro, interés y abono, en una lámina publica el secretario anotaba la cantidad de dinero que entregaba el socio. Una vez terminado lo anterior se daba la información de la cantidad de dinero reunida y se entregaba parte de ella a quien solicitara el préstamo, pero siempre y cuando no tuviera adeudo, es decir, no había préstamo sobre préstamo. El remante se depositaba al Banco para futuros prestamos, todo eso se originaba en mi ranchería Rincón de San Francisco, Michoacán.

Como estábamos prosperando en nuestra situación familiar llamamos la atención a Comunidades circunvecinas como son Vicente Riva Palacio lugar en donde actualmente se encuentra ubicada las oficinas de nuestra Caja, Ciudad Altamirano, Estado de Guerrero, en donde se nos autorizó formar  otro Fondo de Ahorro y capacitarlo.

Posteriormente, mi esposa Margarita Piedra Ramírez y yo, formamos otro Fondo de Ahorro en la cabecera de nuestro municipio San Lucas, Michoacán, recibiendo desde luego la capacitación continua y la retroalimentación física con otros grupos dispersados en territorio michoacano, haciendo un total de ochenta y nueve grupos existentes , y una cantidad en su conjunto más de tres mil socios, el sueño era construir Cooperativa Única con todos esos grupos. Aclarando que todos éramos personas marginadas y de área rural, que no tenía acceso a préstamos, por eso el nombre de esos Fondos.

Socios
0
Grupos
0

Con la modificación da la Ley de Ahorro y Crédito Popular  en el año 2009 se derogó el artículo Cuarto Bis de la ley en comento, que nos permitía ahorrar y hacernos préstamos como grupo de personas sin pagar impuestos, no estar supervisados por Hacienda o el Sat, para dar paso a la creación a la Ley para Regular las Actividades de las Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo que actualmente nos rige.

Al vernos en esta situación la Licenciada Lidia Vázquez Gallegos se contactó con el Licenciado  Manuel Duarte Ramírez y el senador Jorge Ocejo, ellos nos capacitaron y nos convencieron que si queríamos continuar con el ahorro y crédito teníamos que constituirnos en una Sociedad Cooperativa de Ahorro y Préstamo con todas los requisitos que establece  la ley. Sin embargo compañeros de las otras partes  de Michoacán se disolvieron dado que desconocíamos totalmente esa figura jurídica.  Mi esposa Margarita Piedra Ramírez y yo tuvimos que hacer un esfuerzo titánico para conservar la unidad de nuestros tres grupos de ahorradores hasta convencerlos que era necesario transformarnos en una Socap y fue así de que convencidos, el día diez de enero del año dos mil diez con la asesoría del referido licenciado Manuel Duarte Ramírez nos constituimos como Caja, ubicando nuestras oficinas en la población de Vicente Riva Palacio, Michoacán.

Nos constituimos como Cooperativa el 10 de enero del 2010

Al dar ese giro de ciento ochenta grados y el desconocimiento total del manejo de lo que es una Socaps, con apoyo del Licenciado Manuel Duarte nos relacionó con la Alianza Cooperativista Nacional, de la que hoy orgullosamente somos parte, quienes sin reserva alguna nos admitió, nos capacitó, nos relacionó con el Inaes y obtuvimos los materiales de oficina como son: Escritorios, computadoras, sillas, sonido, proyector de pantalla, etc., pues solo teníamos una Mesa.

No dejo pasar desapercibido que nuestro crecimiento  es muy lento, pues existe el temor latente de los socios de que nuestra Caja sea víctima de extorsiones dada la situación de inseguridad que prevalece en nuestra región, sin embrago estamos sobreviviendo y pensamos seguir con este satisfactorio trabajo de servir a los demás, sabemos que no estamos solos y que nuestra organización (ALCONA) nos seguirá arropando y capacitando, además de que nos han enseñado y hecho participes de la lucha necesaria que debemos seguir en defensa de nuestras Cajas hasta obtener  una buena legislación que venga a cumplir con el verdadero fin específico de nuestras Cajas y poder llegar y dejar a nuestras futuras generaciones una verdadera Economía Social y Solidaria tal como lo aprobó el Constituyente en el artículo 25 de nuestra Ley Suprema, que gracias a nuestra organización Alianza Cooperativista Nacional se le está dando vida a lo previsto por el Constituyente  a quienes le brindamos nuestra gratitud y apoyo incondicional, procurando dar lo mejor.

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